Murray
	 
    
    
	         
	
      Reflexión aburrida en el lugar de nadie, donde hay tanta tierra que se te mete en la nariz. Como hoy, camino a casa cuando el viento pegaba tan fuerte en mi cara que decidí caminar agachando la cabeza. O anoche, que leí otra vez ese mail mental, y se había desaparecido. Y lo más raro es que ya ni siquiera pude recordar los nombres o los momentos, pero si estoy seguro de lo que sigue, y será mejor que antes. Ya quiero verte, abrazarte y darte un chingo de besos.
     
     
    
    
  
   
  
  
  
  
  
 
  
    
  
  
  
     
  
  
         
	         
	
      Save the last f*ck for me
     
     
    
    
  
   
  
  
  
  
  
 
  
    
  
  
  
     
  
  
         
    
	 
	 aVrázame
	 
    
    
	         
	
      Cuando recibes una señal tan fuerte y te da miedo, te despiertas sudando y esos fantasmas que antes llegaban de uno en uno ahora se han juntado todos, o quien menos te imaginas en esa visión tétrica de tu pasado te ha pedido permiso para llevarte algo que le corresponde más a ella, te ha enviado un mail mental diciéndote dónde vagan esos espíritus, describiéndolos con nombre y apellido, en una mala ortografía, comentando del sweater rojo que sólo usas en invierno cuando estás un poco nostálgico, y toda tu historia se resume a ese estúpido y antiestético mail con mala ortografía. Confesó porque a todos ve de reojo y como soy en la cama. Tengo miedo y enojo, pero más tengo ganas de poder leer mi mail mental de vez en cuando.